La Guardia Indígena de Caimito, durante su ronda por los linderos establecidos para proteger el territorio, descubrió el pasado 14 de julio de 2024 que una parcela de 73 hectáreas había sido completamente deforestada por los menonitas. En solo una semana de ausencia en esa área específica del territorio, los menonitas arrasaron con la selva. Además, instalaron alambre de púas y un portón de hierro para bloquear el acceso al lindero.
Durante la ronda, un individuo pasó en un motocar, cuyo nombre desconocemos, pero que hemos visto en compañía de los taladores ilegales. Este sujeto amenazó de muerte a nuestros compañeros.